Bunbury es de esas pocas personas en este mundo que se puede permitir, cada cierto tiempo, romper con todo lo anterior y empezar con otra cosa saliendo airoso de ello. Primero lo hizo con Héroes del silencio, y ahora con este disco, el primero tras romper con la banda que le había acompañado en su carrera en solitario, "el huracán ambulante".
Cierto es que este no ha sido un cambio tan grande como el de héroes, es más, en cuanto a estilo musical, en mi opinión, no ha cambiado mucho, pero deshacer una banda y montar otra siempre supone un gran esfuerzo, y los riesgos son muchos.
Demostrando con nota alta que la nueva banda funciona a la perfección en el primer concierto de su nueva gira, en Zaragoza, llegaba el momento de escuchar su nuevo álbum al completo.
El disco comienza con la que fue la primera canción escuchada por todos: "El hombre delgado que no flaqueará jamás", un tema con cerca de siete minutos de duración que marca perfectamente el estilo que va a llevar el disco. Un sonido que puede ser cercano al del rock americano antiguo con el uso marcado de las guitarras. La canción posee muchas frases memorables (no entraré en las infundadas acusaciones de plagio que se han realizado contra esta canción) como: "Es hora de elegir entre morir ajusticiado o jubilado" y es que tiene nada más y nada menos que 6 estrofas y el estribillo...
"Porque las cosas cambian" es un medio tiempo de aire alegre, posiblemente de las mejores canciones del disco. Con una letra positiva nos habla de que todo cambia, y que puede ser para mejor: "Por que sabemos agradecer a pesar de lo vivido, por que de todo comienza a hacer ya mucho tiempo..."
"Bujías para el dolor" es una de las canciones cañeras del disco, la cual tiene una gran fuerza (he de decir que en directo aún más) y un estribillo muy pegadizo. Yo realmente le veo muchas posibilidades como single...
"Si no fuera por ti" es un medio tiempo de aire algo más oscuro. Destacar el ritmo de batería durante el estribillo, me parece realmente original.
"Hay muy poca gente" es el segundo y actual single del disco, una canción de corte algo más pop pero con mucha fuerza y un estribillo muy pegadizo, además de una letra que parece hablar del mismo Bunbury (aunque con él nunca se sabe). Podéis ver su vídeo al final de la crítica.
"El porqué de tus silencios" es una canción de un corte algo más lento. Sin duda es una canción muy agradable de escuchar y que sirve de paso para lo que parece ser una segunda parte del disco en la cual las canciones tienen una menos potencia, ya que son algo más lentas que estas 6 primeras.
"Doscientos huesos y un collar de calaveras" podría ser la primera canción de esta "segunda parte" del disco. Sin duda es una de las mejores de esta parte, con un estribillo que me recuerda a Quique González, y con unas subidas y bajadas que le dan un corte muy entusiasta. A destacar la frase de la canción que dice: "Y yo que dormido a tu lado puedo afirmar que hasta las pequeñas discusiones fueron contigo algo estupendo"
"Irremediablemente cotidiano" es una canción que suena a ritmo de bossanova que habla sobre las injusticias cotidianas de la vida.
"Canción cruel" es una canción lenta y oscura que habla sobre escribir las opiniones de cada uno, acabando con la reflexión de que es mejor escuchar antes de hablar.
"Todos lo haremos mejor en el futuro" es una canción de ritmo lento que da la sensación de ir a golpes en la que Bunbury juega con la voz arrastrándola en un tono más grave.
"Aquí" es la última canción del disco con un aire bastante country y en acústico. Una canción que durante toda su letra las frases comienzan con la palabra "aquí", dando un muy buen resultado con una canción muy agradable de escuchar y en mi opinión idónea para acabar el disco.
El disco, en su versión en formato vinilo contiene cuatro canciones más, que son: "Esto se hace, eso no se hace", "La herida secreta", "Bobby Perú", y "Ven y camina conmigo. En mi opinión, las dos mejores de estas cuatro son "Bobby Perú" y "Ven y camina conmigo", la cual fue creada inicialmente por Bunbury para su amigo, Raphael, y que ha querido recuperar para su disco. Si queréis oírlas pero no tenéis cómo escuchar el vinilo, podéis encontrarlas fácilmente por youtube.
En resumen, Bunbury ha hecho un buen disco, tal y como todos esperábamos, pero en general, a mi me deja algo frío, me esperaba un poco más de él, no digo que no me guste, tiene canciones muy buenas, pero no se, me falta algo... ya sabéis, para gustos colores, seguiremos disfrutando de la genialidad de Enrique, sobre todo en sus directos.
Valoración del disco: 3,5/5
Enrique Bunbury: Hay muy poca gente
No hay comentarios:
Publicar un comentario